JBpescador

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TAMBIEN PUEDES LEER AL AUTOR EN ALGUNO DE SUS LIBROS:

EL ARTE DE LA PESCA. Editorial TIKAL EDICIONES, año 2000

CUADERNO DE PESCA. Editorial TIKAL EDICIONES, año 2002

SECRETOS FUNDAMENTALES DE PESCA EN EL MAR. Editorial Amazon.es, año 2024

martes, 20 de abril de 2010

MANTENIMIENTO DEL MATERIAL DE PESCA


MANTENIMIENTO DEL MATERIAL
Día a día el pescador de mar está constantemente innovando su material. De hecho se da el caso de pescadores que tienen hasta 15 cañas guardadas en casa y en perfecto estado de revista. Muchas de ellas, ni las utiliza, pero sin embargo nunca quiere desprenderse de ellas, tal vez, porque las puede necesitar en un momento dado o porque al final se les coge cariño. Otra de las cosas que suele ser muy común en los pescadores es, el no desprenderse de la primera caña que se compró, tal vez sea por cariño, tal vez por los recuerdos que guarda, o incluso porque con ella consiguió la pieza más valiosa de su palmarés, el caso, que por una cosa u otra, nunca nos desprenderemos de ella. Todo esto está muy bien, pero si no sabemos conservarlas de nada servirá guardarlas, ya que tarde o temprano se deteriorarán, pero que igualmente sucede con el resto del material: Carretes, señuelos, anzuelos, utensilios comunes, etc. Por todo esto, creo necesario recordar en este articulo las razones más importantes de conservación y mantenimiento de nuestro material.

CAÑAS:

Si las cañas las revisamos antes de pescar por si han sufrido algún deterioro, después de pescar debemos limpiarlas de restos de sal, arena o incluso agua que pueda haber salpicado. No ha sido la primera vez que después de terminar una jornada de pesca hemos cerrado nuestra caña telescópica y por no haberla limpiado antes la hemos rayado con una mota de arena que se había quedado impregnada en la fibra; ralladura que a larga será muy perjudicial para la caña. Cada vez que podamos, y tranquilos en casa, debemos limpiarlas con un trapo humedecido con agua dulce, haciendo hincapié en todos los rincones de la caña, debajo de las anillas, en los filos de los encajes, etc. Y, cada cierto tiempo debemos aplicarles una ligera capa de una grasa especial, que se vende para este menester; grasa que impedirá que se le pegue la suciedad y menos aún el salitre verdoso de la sal. Esta grasa también la aplicaremos a las puntas y al agujero de los tramos encajables de una caña de este tipo, ya que de esta forma impedirá que se nos atranque cuando las desmontemos después de pescar con ella. Después de esto, solo nos restará guardarla en su funda de tela y estará lista para ser usada la próxima vez.

Muchas veces se ha dado el caso de que se rompa una anilla y por lo tanto tengamos que cambiarla. En las cañas telescópicas esta operación es relativamente fácil, ya que únicamente habrá que calentar la base de la anilla y esta saldrá fácilmente, siendo sustituida por otra nueva y pegada a la fibra con las barritas de plástico termales, o sea pegamento caliente. Pero en el caso de la rotura de una anilla en una caña de tramos, la cosa cambia, principalmente porque estas anillas no están sujetas con pegamento a la fibra, sino que están literalmente anudadas a ella. Para realizar un buen cambio, primero deberemos quitar la anilla rota con una cuchilla o cúter, pero sin olvidarnos de marcar el lugar correcto donde estaba la anilla anterior. Una vez hecho esto deberemos limar las puntas de la anilla nueva de forma que al ser anudada no se quede saliente alguno en el amarre. Después marcaremos con un lápiz lo largo que vamos a hacer el amarre marcando y también el centro de ambos puntos para saber donde debe de ir correctamente la anilla. Posicionaremos dicha anilla en el punto central y aliniaremos el orificio de la anilla con el portacarretes. Una vez posicionada sujetaremos una pata de dicha anilla con un trozo de cinta aislante, mientras que por la otra pata comenzaremos el amarre. En primer lugar pondremos una punta del hilo de amarre mirando hacia el interior de la anilla, después comenzaremos a darle vueltas de forma que la primera sujete al extremo que miraba hacia dentro. La vueltas deben ser firmes y contundentes y siempre hacia dentro. Después de varias vueltas cortaremos el sedal de la punta que ya habrá sido sujetado con las vueltas de inicio. Cuando veamos que nos quedan 5 o 6 vueltas para terminar, deberemos colocar un trozo de hilo formando un bucle delante del amarre, de forma que al terminar el amarre introduzcamos la punta por dicho bucle y la saquemos por detrás de las 5 o 6 ultimas vueltas. De esta forma simplemente no quedará recortar el hilo sobrante con mucho cuidado y después de verificar que está bien confeccionada la atadura, dar una ligera capa de laca o resina para que el amarre no se pueda soltar nunca.
Pero lo que si está claro es que para evitar cualquier rotura de anillas en nuestras cañas deberemos llevar una buena funda de transporte para ellas. Para este menester hay muchas marcas en el mercado que tienen fundas con varias capacidades, de dos, tres, y hasta cuatro. Pero sobre todo debe tener una buena terminacion en las correas de transporte, con doble perpunte, junto con una buena cremallera. Todo esto implica menor riesgo de rotura en caso de una caída accidental.

CARRETES:

Con respecto al mantenimiento de los carretes, debemos saber que son los que más suciedad cogen. Si las cañas las limpiamos en el lugar de pesca antes de guardarlas, con los carretes sucede lo mismo, ya que son los más propensos a caerles arena o salpicarles el agua salada. Por lo tanto, debemos limpiarlos con un trapo seco antes de recoger nuestro material en la zona de pesca. En el caso, de no poder hacerlo en el momento de la recogida, deberemos limpiarlos en casa; para ello, simplemente los lavaremos bien con abundante agua dulce, para después secarlos perfectamente por todos sus rincones. Los carretes de pesca, son máquinas y como tales debemos tenerlas en perfecto estado, ello significa que cada cierto tiempo debemos abrirlos y aplicarles grasa donde veamos que le falta, aparte de que todos los mecanismos de esta máquina debemos tenerlos bien lubricados siempre para un mejor funcionamiento. Por ello, debemos aplicarles grasa en la corona dentada, en el eje principal, en la manivela, y como no, en el rodillo guía hilos. Más tarde solo nos restará guardarlo en su funda de tela para una mejor conservación. Con relación al transporte es preferible meterlos en la mochila en un departamento que anteriormente nosotros hayamos forrado con un poco de esponja fina, de esta forma evitara muchos de los pequeños golpes, que se le dan cuando descansamos el equipaje.

SEDALES:

En el tema de los sedales, debemos tener claro, que un sedal bien conservado nos durará mucho más. Muchos pescadores no se preocupan de la limpieza de sus sedales, teniendo que cambiar de sedal muy a menudo. Pero, lo peor del caso no es el tener que cambiarlos, sino que en el momento que más falta hace que un sedal sea resistente, es cuando se rompe perdiendo la pieza que tenían enganchada. Y todo debido a la mala conservación del sedal en el carrete. Por todo esto, considero un punto muy importante el limpiar el sedal después de haberlo utilizado. Para hacerlo fácil simplemente humedecemos un simple trapo en agua dulce, de la que llevamos para beber, y colocando el trapo entre la última anilla de la caña y el carrete abrazando al sedal, recogeremos la línea que tengamos fuera del carrete y la sal se ira quedando en dicho trapo. Este acción debemos hacerla después de haber lanzado por última vez, pero para evitar enroques debemos hacer el último lanzamiento sin aparejos, o sea únicamente con el plomo. También cabe la posibilidad de que no podamos limpiar el sedal en el lugar de pesca, bien sea por falta de tiempo, pereza, o incluso por olvido. Pero al llegar a casa no debemos olvidar y menos aún demorar unos días su limpieza, porque de lo contrario no servirá de nada. Por ello deberemos introducir la bobina del carrete en cubo con agua dulce o bien lavarla debajo del grifo. Esta acción no es tan eficaz como el pasarle el trapo humedecido de agua dulce en la orilla del mar, pero por lo menos las primeras vueltas de sedal se limpiarán bien, e incluso si las dejamos algún día dentro del agua dulce, la sal que contienen el hilo se ira disolviendo en el agua.
En el extenso mercado de accesorios existente en el tema de la pesca, existe un accesorio especialmente utilizado para el engrasamiento de sedales trenzados. Este accesorio es la "castañuela", que también nos puede servir para limpiar los sedales de restos de sal, ya que en su interior contiene dos piezas de fieltro que son las encargadas de absorber la sal contenida en el agua que se le pega a los sedales, y que debemos utilizar de igual forma que el trapo húmedo.

ANZUELOS:

Está claro que la mejor conservación de los anzuelos es el desecharlos después de haber sido utilizados, porque a veces no merece la pena el guardarlos. En el caso de que hayamos decidido guardarlos debemos saber que si no los secamos bien pueden fácilmente oxidarse, aparte de que a la hora de guardarlos nunca lo haremos con el sedal sobrante de una pesquera, o sea le quitaremos la cameta con la que habíamos pescado y los guardaremos en una caja con polvos de talco en su interior, por si no los hemos secado bien, el talco se encargue de hacerlo. Pero como he dicho antes, a veces es preferible desecharlos, debido a la perdida del filo o del estañado. Además hoy en día existen multitud de marcas que tienen los anzuelos ya empatillados y con muy buena calidad.

SEÑUELOS o CEBOS ARTIFICIALES:

Después de una buena jornada de pesca en el mar, bien sea en la embarcación haciendo currican, jigging, etc., o por el contrario en la orilla del mar haciendo spining. Tenemos que secar y limpiar bien nuestros señuelos. A pesar de tener que limpiar los señuelos que hemos utilizado, se cae en el error muchas veces de que cuando estamos pescando en las orilla o en la embarcación dejamos la caja de los señuelos abierta y las salpicaduras la mojan sin que reparemos en ello. Toda esta humedad muchas veces no reparamos en quitarla y a la larga los anzuelos de los artificiales terminan por oxidarse. Por todo ello, siempre cerraremos la caja, e iremos abriendola segun cambiemos de cebo artificial, pero nunca dejaremos los señuelos expuestos a la sal de la brisa y sobre todo al sol. Después de terminar nuestra jornada de pesca, es muy recomendable el lavar los señuelos con agua dulce y secarlos con un trapo. Además existe un truco para que las ancoritas o poteras de dichos señuelos no se enreden unas con otras en la caja, y es simplemente enlazar dichas poteras con un elástico.

EQUIPAMIENTO:

El equipamiento, es una de las cosas más importantes en el tema de la pesca, dependiendo directamente de la estación del año en que pesquemos y de la modalidad que practiquemos. No es lo mismo lanzar una caña una noche de verano que una noche de invierno, ya que el vestuario no es el mismo y por lo tanto, en verano llevaremos menos ropa y tendremos más movilidad.
Como he dicho anteriormente, si en los meses estivales de verano no necesitamos prácticamente vestuario, en invierno la cosa cambia radicalmente, debido principalmente al frío existente en el lugar.
El pescador es una persona que nunca pesca en la misma zona, sino que se desplaza por la costa buscado esas señales que produce el mar: zonas de espuma, depredadores comiendo, recodos escondidos, etc., por todo ello, el vestuario juega un papel muy importante, al igual que la seguridad del pescador. Unas buenas botas, harán desplazarse por las rocas sin dificultad y con seguridad; un vadeador hará al pescador introducirse en el mar sin mojarse, sobre todo en las zonas de playa; un impermeable, evitará mojarse con las salpicadura de las olas, aparte de resguardarle de la lluvia; una gorra, evitará las posibles insolaciones y como no, un chaleco le servirá para portar todo tipo de accesorios. Y en el caso de utilizar la modalidad de pesca a mosca, debemos recordar que esta modalidadad se realiza a pez visto, no se nos debe olvidar las gafas polarizadas, pues es-tas gafas evitarán los reflejos del agua y veremos los peces sin dificultad.

Pero, todo esto no servirá de nada si el pescador no es una persona precavida. Por lo tanto, nunca nos arriesgaremos a colocarnos en zonas de difícil acceso, aunque con ello obtengamos un buen rato de ocio.
AQUI OS DEJO EL VIDEO DE COMO FUNCIONA UN CARRETE DE PESCAR, FIJAROS BIEN PORQUE AHI SERA DONDE DEBEMOS ENGRASAR LAS PIEZAS...

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